Puertas abiertas
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buscan noticias.

lunes, 29 de diciembre de 2008

En el otro lado del sol



"Sabed que el mundo es un espejo de arriba a abajo,
en cada átomo hay cientos de soles flamígeros.
Penetrad en el corazón de una sola gota de agua,
y cien océanos puros emergen"

Golshan e Râz



Difícil se me está haciendo el conocerte. Un camino abrupto en un oaxis yermo es el paisaje que recorro, y siento que mis fuerzas expiran por el cansancio de mi corazón. El barro es moldeable donde dejo caer mis lágrimas, y hace crecer tulipanes en cerrados capullos, que entrego a Mehit para aplacar sus celos y me deje continuar. Sigo tus huellas hasta la Puerta de la Taberna. La Caravana partió hacia un lugar impreciso y yo continuo sin saber de tí. La memoria se retrasa y ya no puedo regresar al ayer. Ptahhotep me aconseja que rompa las trabas que aún me quedan, y pida ayuda a una de las Aves: los pájaros son los que dicen siempre verdades y puedes contar con su lealtad. Minerva te enseñará el lenguaje", y añadió: "si triunfas es porque estás en armonía con la naturaleza".

Y así, acompañada de uno de ellos, atravieso el largo camino de las siete vallas y voy en busca de la Sagrada Barca que me acerque hasta donde estás tú.
¿Me darás a conocer tu nombre?

miércoles, 17 de diciembre de 2008

A Belit-Seri



Hay nieve en mi jardín. Nieve blanca y mullida. ¡Una preciosidad! ¡Cómo es posible que una cosa tan hermosa venga unida a lo que detesto tanto como es el frío! Me siento partida en dos, la que siente la belleza de la naturaleza, de un invierno en todo su explendor, y la que quisiera dar la vuelta hacia ese cálido sur, lejos de heladas y nieblas. ¡Imposible!, a no ser que cada una de esas partes fueran efectivamente dos. Un claro caso de dualidad deseada, de la que tú – Belit Seri – tienes que saber muy bien, aunque dudo si fue un hecho consentido o una imposición por uno de aquellos dioses que decían ser tus amigos.

No sé si me lo vas a agradecer, pero siento la necesidad de adentrarme en tu vida. Te imagino no muy alto, pelo oscuro y una cansada expresión. Silencioso, como debe ser un escriba. A simple vista no pareces ser de los que me robarían el corazón, pero …. tiene que haber algo más detrás de esa imagen que me está exigiendo tanto tiempo. Presiento que me encuentro atrapada en esa telaraña sin horas que nombrabas, intentando encontrar la luz en esas dos palabras que forman tu nombre. ¿Quién eres Belit-Seri? ¿Qué es eso dulce y amargo a la vez que hay en el sonido al nombrarte? Pienso que es en tu nombre donde encontraré la clave que dará a conocer esa dualidad que siento en tí y que marca tu silencio en la Historia. Símbolo bivalente de tu sexualidad – tendremos que aceptar lo que Platón nos enseñó, que hay en el hombre más de mujer de lo que muchos piensan - que crea esa situación propia de las cosas exteriores, visibles y conflictivas en este mundo que ya dejaste: tu nombre bajo la sombra del número par y sus correspondientes múltiplos hasta romper esa dualidad cuando, por exigencias de Isis-Sret, uno fue igual a tres y los tres fueron la misma persona.

Belit-Seri, seguiré la llamada de tu nombre hasta encontrar el secreto que oculta. ¡Qué Ishhara proteja y guarde mi promesa!

La Navidad en Egipto

Foto Vía: Wiki Commons
Texto: http://sobreegipto.com/



La Catedral de San Marcos, en El Cairo

Cada vez falta menos para la gran ocasión, y comenzaba ya yo a preguntarme cómo celebrarían la Navidad los coptos, los cuales representan claramente el grupo mayoritario y tradicional de la religión cristiana en Egipto. Compartamos algunas de las respuestas que he podido hallar.
Al parecer, existen interesantes relaciones entre el calendario cristiano y el antiguo calendario faraónico, algo que para quienes se han interesado alguna vez en los avatares acaecidos comúnmente en la evangelización alrededor de todo el mundo podrá no resultar sorprendente.
Comenzando por lo esencial, el nacimiento de Jesús no se celebra en Egipto el 25 de diciembre, sino el 7 de enero. Esta particularidad no es exclusiva de los coptos –la Iglesia Ortodoxa Rusa también toma como referencia el 7 de enero–, pero en este caso la fecha es elegida por su correspondencia con el 29º día del mes copto de kiohk.
Desde el 25 de noviembre hasta la víspera de Navidad –esto es, hasta el 6 de enero–, se realiza un ayuno que no consiste en abandonar por completo la comida, sino en elegir sólo aquellos alimentos que no provienen de origen animal. Finalmente, el gran día de las celebraciones la tradicional cena incluye un delicioso plato de Fatta, preparado con arroz y, por supuesto, carne.
En general, las festividades inician durante la semana previa al 7 de enero. Las casas comienzan a exhibir sus decoraciones luminosas y los árboles de Navidad también se hacen presentes. Las tarjetas navideñas también son una tradición muy respetada en Egipto.
Lejos de generar un gran ajetreo comercial, como en buena parte del mundo, la Navidad copta centra su atención en la solidaridad. A la hora de comprar los regalos y los objetos típicos para adornar el hogar, los egipcios se dirigen a los bazares organizados para beneficio de las causas locales.
A medianoche, durante la misa, las campanas de las iglesias comienzan a repiquetear, anunciando la llegada al mundo de Cristo. Muchos templos en Egipto son considerados parte de la ruta seguida por la Sagrada Familia en su viaje por el país, y congregan a numerosos fieles cada año. El caso más emblemático es el de la Catedral de San Marcos, en el Cairo, en donde el Papa copto preside la misa.